jueves, 31 de diciembre de 2009

Fatum (obvio)


Al llegar el capítulo ocho, Virtualio debía desaparecer; no obstante, su esencia imaginaria lo dificultaba. El autor afrontaba un problema de coherencia: si el personaje era irreal, no podría suprimirlo, pues nunca había existido.
¿Cómo arreglarlo? Sencillo, invirtió los términos.
Durante las páginas siguientes, lo verdadero empezó a no serlo. Lo ficticio se materializaba y Virtualio adquiría poco a poco dimensiones medibles. Se palpó hombros, cabeza, nariz: todo sólido. Gracias, jefe, pensó, eufórico.
Cuando más disfrutaba, el relato le obligó a sortear el «Paso de la Perplejidad», ahora muy cierto, resbaló, y acabó el capítulo siete. Vaya tropezón más predestinado.

lunes, 28 de diciembre de 2009

Prohibición para obligar



Manía muy extendida entre gobernantes –observada incluso en comunidades de vecinos— es la de poner puertas al campo, límites a lo infinito o topes a lo que no puede taponarse.
Por el anhelado bienestar de todos, el dirigente se siente impelido a dictar cantidades desmedidas de normas, en todos los ámbitos, que nos protejan de comportamientos incívicos, nocivos, perjudiciales, antiecológicos o, incluso, antiestéticos.
Finalmente, resultará que lo poco que pueda hacerse se convertirá en obligatorio, porque no habrá más opciones. La regulación total dará paso a la dictadura de forzoso cumplimiento, cumplo y miento, todo por mi bien, obvio es.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Curiosidad o casualidad



«Curiosamente, tengo conmigo a la autora del libro, que ha venido para presentarlo a través de nuestros micrófonos», comenzó el locutor del programa.
Digo yo que dijo eso porque sería una circunstancia extraña, llamativa, sorpresiva o interesante.
Algo distinto sería que la citada escritora estuviera caminando por el pasillo de la redacción y, accidentalmente, el conductor se la hubiera encontrado.
En tal caso, debería haber dicho «Está junto a mí, casualmente, la autora de esta novela, que paseaba por la redacción» y añadir, quizás, «curiosamente, un domingo por la mañana, algo muy singular en una persona tan trasnochadora como ella».

jueves, 24 de diciembre de 2009

Besos de fogueo


Si la bala que se dispara para hacer ruido, sin daños, es de fogueo, ¿qué diríamos que es un beso de fogueo?
Sugerencias:
1) Provoca gran excitación pero ningún efecto profundo en quien lo recibe.
2) Se regala a quien nunca llegó a compartir destino, con efecto retroactivo, a modo de pista fogosa de lo que pudo haber sido.
3) Propio del sexo «deportivo», algo escandaloso pero sin pólvora de compromiso.
4) Genera expectativas, suerte de advertencia, antes de rellenar el cargador con los reales.
Una vez disparado, no deja casquillos ni pruebas de calibre o procedencia, ¿ventaja o inconveniente?

martes, 13 de octubre de 2009

Juguetes y cifras


Uno, dos, tres... hasta casi veinticinco mil juguetes para niño y para niña. Se dice pronto. Ocupan varios camiones y llegaron hace unas semanas a los campamentos saharauis. Mis amigos –les envidio, añoro aquello– están ahora en la hamada argelina, repartiendo una momentánea felicidad a la chavalería víctima del conflicto. Su gente lleva así casi treinta y cinco años. Otra cifra. ¿Es posible asignar alguna a la hipocresía occidental? Se acaban los ceros, las potencias podrían servirnos, tanto matemáticas como económicas, pero no se mueven porque el rey moro las multiplica por cero desde su trono, como a su pueblo.

viernes, 4 de septiembre de 2009

Motivación laboral


Juan Perezas salió a buscar a Luis Rumboso, para acudir juntos a la oficina del desempleo y apuntarse por primera vez. Una vez allí, Pilar Competente fue anotando datos, y les preguntó sobre sus inquietudes.
Perezas miró a Rumboso con desgana, inclinando la cabeza hacia un lado, como diciéndole «¿inquieto, yo?».
Rumboso, como siempre, respondió veloz: «¡camareros de bar de estriptis!».
Competente levantó los ojos por encima de las gafas de ver, volvió a bajarlas y escribió en su ordenador lo que le dijeron. Para ambos. Total, tenían las mismas posibilidades de conseguir ese trabajo que cualquier otro: zero zapatero.

Endless (sin fin)


Al final, habré terminado. Obvio. No tanto: una vez allí, veré lo que hay más allá, hasta donde distingan mis ojos o mi imaginación, y desearé alcanzarlo.
Va con mi condición de bicho bípedo, pensante y con aspiraciones; es más, seguro que lo paso mal —puta envidia— viendo cómo otros van llegando antes, más cómodos, por mejores senderos o con menos canas, porque aprendieron diligentes. Sufriré, pero trataré de subsanar mis limitaciones, y proseguiré hasta concluir cada vez lo que inicie. Y así sin parar, mientras no me quiten los caminos, me corten las piernas o me borren los sueños.

martes, 1 de septiembre de 2009

Malena regresa de vacaciones


Todo está como quedó, quizás más bronceado, o quemado. Lo que estaba sin terminar a finales de junio, sigue inacabado; lo que no había empezado, ni siquiera nació, a pesar del abundante ocio. Lo que se rompió, aún no se ha recompuesto. Lo que se unió, sigue estándolo, menos mal.
Llegan los coleccionables, qué lata, un titánic terminado en dos años, ¿quién se anima? total, luego se hundirá.
Una muesca más a la culata de la vida, y van varias filas de diez. Ya caben menos. No todo está perdido, ésta va a ser la buena, vuelve a proponerse Malena.

lunes, 29 de junio de 2009

De lado


Un ejemplo más de la porosidad del español ante el inglés es el caso de «perfil». En otros tiempos, nos hacíamos fotos o retratos posando de lado, pero no se nos ocurría recibir visitas en tal postura. Ahora, no cesamos de cambiarlo, cual cirujanos estéticos virtuales, y alteramos su contenido, añadimos cualidades (¿prótesis?) o, si no nos complace, lo eliminamos de un clic, o dos, según güindous.
No distinguimos a los que lo tienen bajo, por muy tachenkos que sean, pues son muy discretos, ni contratamos a los de perfil profesional irregular, aunque carezcan de horribles verrugas en la nariz.

viernes, 19 de junio de 2009

Protestas en baja resolución


Llegan escenas de escasa calidad de las revueltas. Mal se distinguen pulseras y pañuelos verdes, símbolos del disgusto más allá de sus fronteras, aunque esta vez la lucha parece perdida de antemano.
Los celulares son notarios clandestinos y absorben en sus memorias la resaca de esperanza diluida en sangre que provocan los pseudodemócratas del minarete. Después, la red dispersa por el globo los disturbios con un aspecto pixelado, imposible de falsificar.
Es más fácil trastocar los resultados de las urnas, pero Teherán ofrece estos días una altísima resolución que circula mal por la banda estrecha de mente de sus ayatolás.

viernes, 12 de junio de 2009

Oremus perdido


El oficiante formulaba cada tanto una llamada a la participación: «¡Oremus!». Los fieles respondían, completando la oración. No todos sabían latín –más bien, casi nadie—, pero el imperativo era incuestionable. El que estaba en las batuecas retornaba de inmediato al rebaño.
Esto ocurría en España no hace tantos siglos.
Hoy mi ciberquejido, ya chillido impaciente, es otro exigente ¡OREMUS! para recuperar el hilo de la cordura o, mejor, para elegir celebrantes sensatos que conozcan la vaina, aunque no chapurreen latín, ni malamente inglés. El diletante pucelanoleonés ya no se digna aceptar misales ni guiaburros, con la liturgia tan avanzada.

jueves, 11 de junio de 2009

Formato calificado


La relevancia de un término de sonoridad y brillo tan exiguos como es «formato» despunta al enumerar la cantidad de calificativos que pueden acompañarlo.
Así, del tirón: reducido, familiar, económico, completo, normalizado, ampliado, extenso, básico, habitual, extraordinario, breve, largo, condensado, empaquetado, compacto, revisado, confirmado, bruto, prolongado, parcial, panorámico, horizontal, vertical, gráfico, impreso, electrónico, virtual, real, mp3, pdf, televisivo, radiofónico, comprimido, legal, apaisado, futurístico, ergonómico, incómodo, confortable, explícito, implícito, dinámico, estático, moderno, antiguo, obsoleto, limpio, inadecuado, incompatible, soportado, volátil.
Jamás tomaría un vino bueno en un vaso de plástico, ni de cristal grueso, la copa de globo sería mi formato inexcusable.

miércoles, 10 de junio de 2009

Sensación cronológica


Hay dos sensaciones de novedosa definición que nos afectan a diario: la térmica y la cronológica. La primera sobra explicarla, por archinombrada últimamente. No así la cronológica, de tan personal como se manifiesta. La hora estaría marcada por nuestro cuerpo. Igual que el viento con baja temperatura intensifica la sensación térmica de frío, al mediodía el serrano —cuerpazo— podría empezar a reclamarnos el reposo propio de medianoche avanzada. Nos despertaríamos con la sensación cronológica de haber madrugado, para que Dios nos ayude, si quiere, y trabajar, desde nuestra hora temprana, aunque sea ya la del telediario vespertino. Jetlag sin volar.

martes, 19 de mayo de 2009

Entropía


Los días de ese reino estaban contados, aunque aún fueran bastantes. Como su nombre indicaba, su desbarajuste progresivo era imparable, irremediable e irrecuperable. La energía no se transformaba, ya venía creada y sólo podía escurrirse como agua entre los dedos.
Los entropianos lo sabían, y no desperdiciaban el tiempo con inútiles tratamientos antiedad, es obvio. Vivían absorbidos en la arritmia del desorden, con cierta creatividad, cumpliendo la misión tácita de idear para sus descendientes pautas de máximo disfrute, físico y mental, hasta el advenimiento del caos definitivo.
Eran el único modelo trágico de carpe diem, sine die conocido hasta entonces.

miércoles, 13 de mayo de 2009

Fidelidad inalámbrica


«Gracias a la técnica, disfrutamos de una fidelidad inaudita, en su modalidad carente de cables, libre de ataduras, para enviar ficheros, recibir fotos, comunicarnos, relacionarnos, entre otras gozadas: en inglés, guaifi.
Al ser más moderna, seguro que supera a la de antes, que no sería tan elevada como su nombre pretendía, alta fidelidad, jaifi
Mi pobre silogismo (si p entonces q...) concluía insistiendo en que la falta de ligaduras era prueba de mayor fidelidad que su abundancia.
Así se lo expliqué varias veces, pero me abandonó por darle cobertura total ¡real! a una amiga recién agregada a mi red social.

viernes, 8 de mayo de 2009

Jatropha (tempate o piñón manso)


Quizás el nombre tan peculiar frene la difusión de esta alternativa a los biocombustibles destrozaselvas y rompecosechas más conocidos y denostados.
Crece en sitios donde no lo hacen otras plantas, con agua escasa y condiciones rebeldes. El biodiésel obtenido del fruto no envidia nada al cosechado de dinosaurios muertos.
Como en el cerdo, se aprovecha todo: el tronco da látex, las hojas, medicinas e insecticidas y la cáscara, fertilizantes. No se come; por tanto, no compite con aceites de nuestras mesas.
Las ventajas sociales «colaterales» son obvias, y sabemos que van llegando adonde antes sólo se recolectaba desesperación y miseria.

jueves, 7 de mayo de 2009

Face-Food (comida por la cara)


Expertos en ferias, cuchipandas y saraos de los de gratis total, estos inefables personajes saben exactamente qué se cuece en cada chiringuito, y dónde ubicarse para llegar a tiempo cuando la paella, por ejemplo, alcance su punto. Van solos. La compañía entorpecería su labor arrimatoria, y pondría en evidencia su afán.
Si tienen alguna edad, la tercera, llegan a enfrentarse con los que están en la cola, cuando vulneran su derecho a gorronear en orden. Faltaría más.
Una vez servidos, avanzan hasta la siguiente degustación. Quizás, recomienden en voz baja las mejores casetas a los recién llegados de su especie.

domingo, 3 de mayo de 2009

Gallos en el Raplamento


Estrasburgo cedía la solemnidad de su pleno a unos peculiares ciudadanos que solicitaron expresarse un rato en ese escenario tan insólito. Los ujieres contenían su recelo, ante tan colorida aglomeración de gorras beisboleras, pañuelos anudados, sudaderas anchísimas con capucha, deportivas enormes sin atar, pulgares y meñiques estirados y amenazadores. Comenzó la batalla de gallos.
Los emsis se emplearon a tope,
... calentando / a sus seguidores...
... con los versos / más provocadores..
Ese día hubo mucho contenido —quizás sólo continente— en cada turno, réplica y contrarréplica. El diario visual de la sesión colgaba de yutiuf poco antes de comer.

viernes, 24 de abril de 2009

No me libro de ser el pasado


Sacó el librochicle que le pasaron. Sentada en el monorraíl neumático, Malena ya salivaba pensando en su contenido. Sólo desenvolvió el primer gusticapítulo. El tren llegaría antes y no percibiría más sensaciones durante el trayecto.
Antes de agotarse los árboles, las editoriales habían encontrado formas novedosas de transmitir las novelas que los escritores destilaban sin cesar. La semialucinación creativa era la más exitosa. Provocaba efectos idénticos a la antigua lectura: vivir otras realidades, imaginar el perfil —antaño, carácter o rasgos— de los personajes, por ejemplo. Para mascarlas con fruición, además, sólo publicaban las historias escritas con originalidad y sabor persistente.

sábado, 18 de abril de 2009

Congratulación


La congratulación es un proceso semejante al gratinado, porque ambos dan lugar a una apariencia externa igual de crujiente y lustrosa. Las dos acciones se aplican casi siempre de forma superficial. Podemos congratularnos —a nosotros mismos, suerte de onanismo felicitador—, o hacerlo por lo que han hecho otros, pero sin decir «te congratulo», sino «me congratulo» de tus logros. El brillo y la rigidez consecuencia del gratinado saltan a la vista cuando la congratulación es pública, por ser una palabra sonora y polisilábica, pero lo sabroso del horneado se pierde tras hincar el diente a una felicitación poco sincera.

viernes, 17 de abril de 2009

Solucionadores


Cierro las orejas, a modo de murallas, ante la mentecatez sonora reinante de contertulios expertos, lenguaraces y colaboradores mediáticos cuyas intervenciones comienzan circunspectas por un omnipresente «el problema es que...» y variantes.
Como si no se expresaran por sí solas, surgen teorizantes de variados pelajes que definen nuestras congojas; en especial, esos gurús con lucs de sabihondillos, que lo hacen siempre a toro pasado.
La ratio «problema enunciado/solución propuesta» no deja margen al optimismo, pero mantiene en su puesto a esas legiones de verborreicos de pago alejados de las colas del paro, y librándoles de decir «el problema... ¿soy yo?».

jueves, 16 de abril de 2009

Legado


La norma dispondrá que toda persona próxima a dejar esta sociedad deberá elegir con esmero cómo quiere que la recuerden. Valdrán objetos, escritos, documentos gráficos o pruebas sensoriales multimedia de cualquier índole. Si quien marcha no elige bien, su futuro en la otra zona titubeará sobre la pobre calidad de dicha selección.
Un legado claro, incuestionable, prolongará la existencia; uno ambiguo, perezoso, la acortará. Esa duración dependerá de la intensidad del recuerdo cedido a los que permanezcan.
En realidad —y en ficción—, sólo abandonamos a los humanos al desvanecerse la última memoria que queda de nuestra estancia entre ellos.

miércoles, 15 de abril de 2009

Llegaremos mañana — Stop — prepare casa


Salvo por las películas, pocos de menos de veinte años conocen, han visto o, incluso, tocado nunca un telegrama.
Tal comunicación rauda, casi inmediata para esos tiempos, llegaba el mismo día, o antes. El remitente se personaba en Correos, rellenaba un impreso escogiendo las frases precisas, cual SMS precursor, usando una casilla por letra, y pagaba según las palabras empleadas y su destino. Se reservaba para noticias urgentes, malas casi siempre.
Mi bancario conocido —carezco de amigos del sector—, me contó que aún se usa, ahora para notificar embargos y similares. Prefiero no volver a verlo nunca, el telegrama.

sábado, 4 de abril de 2009

Sosiego


La velocidad de la respiración refleja el pálpito del corazón, y éste es testigo sufridor del delirante ritmo con que vivimos algunos. Ante la pantalla, nuestra letanía interdental suplica días de veintiocho o treinta horas y, al final de cada jornada, aún sentimos que no nos ha cundido nada. Dormimos seis o siete horas y el resto de recorrido visible del sol lo quemamos sin apaciguar el jadeo.
Me voy al Sáhara, con mis hermanos exiliados: inspiraré hondo, y dejaré que el desierto, ése que «no se mueve, porque todo puede esperar» me contagie algo de su serenidad. Sin pasarme.

viernes, 20 de marzo de 2009

Reinventarse

MENTES ABIERTAS Y CAPACIDADES PLENAS
Mi amiga y compañera Balvaroli —ingenioso alias, mezcla de denominación de vino, aceite con ajo y superheroína italiana— me sugirió que para superar esta crisis debíamos reinventarnos.
Enseguida nos pusimos a ello. Sin dudarlo.
Tenemos los planos avanzados, los materiales optimizados y las prestaciones delineadas, pero aún falta el nombre para el nuevo ego. «Human2.0» está demodé; «máquina», demasiado frío; «androide», peliculero; «ente», metafísico en exceso.
JASP es una buena opción. Si bien falla la jota, la reinvención nos exigirá estar preparados sobradamente para lo que dicen que llegará, aunque sólo sea por repartir con generosidad el talento no consumido.

miércoles, 18 de marzo de 2009

Littera scripta manet

SI TIENES CURIOSIDAD POR LO QUE PONE AQUÍ, ¡REALMENTE TE SOBRA MUCHO TIEMPO!
En apariencia, el negro sobre blanco tradicional no nos tendría que despistar con caracteres subrayados, en color o animados. Podemos alcanzar el punto final del tirón, o bien, detenernos para preguntar al que nos presenta un documento, consultar diccionarios o telefonear al autor para pedir aclaraciones. Quizá entonces sí avancemos hasta terminar, o no, y volvamos a indagar, tomemos reseñas en un bloc de notas, o las copiemos para enriquecer los datos de un informe que nos ocupa.
Mi enhorabuena al ingenioso inventor del ciberhipertexto, por suprimir todas esas distracciones, creando otras muchas que expanden sin freno nuestra cintura sedentaria.

jueves, 12 de marzo de 2009

Telaraña de amplitud mundial


Tal es el inquietante nombre de la red de redes en inglés, aunque pronunciado en esa lengua suene a gárgaras interrumpidas, «guorl-guaid-güeb». Ahora los franceses de la Fjans aportan a la mundialización (ellos no dicen nunca globalización) una ley para atrapar a los que despegan cosas del tarantulato electrónico.
Si alguien quiere aprovecharse de lo que cae en la red, el árbol, o proveedor, informará enseguida al gran tejedor-estado de que hay una nueva víctima. Los artistas, custodios de la granja arácnida, observarán y cobrarán. Menguados de imaginación, prefieren comerse a su público que ofrecerle innovación y formatos más económicos.

viernes, 6 de marzo de 2009

Siete días para enfriar la irritación


Escenario: protesta concentrada, o concentración protesta, contra la ferocidad de la policía marroquí, ante la embajada del rey dictador. Una calle libre en la capital de un país europeo libre.
Argumento: los salvajes habían violado con sus porras a una joven saharaui en el territorio ocupado.
Nos faltaba el cuño autorizador, por lo súbito del evento. Daba igual, no íbamos a romper nada material. Enfrente, enormes vehículos antidisturbios y enormes humanos antidisturbios. Sobraron, porque no buscábamos disturbar, sino turbar, al imperturbable vecino de Rabat, hermano del borbón, parece.
Como hubieran hecho allí, apuntaron nuestros carnés «por ser más de veinte».

miércoles, 25 de febrero de 2009

Valencia–Pekín, sin intérpretes


Buda o alguna deidad oriental nos envía mentes clarividentes, sin merecerlo.
Como lo de educarse para ciudadanos en inglés no prosperaba, ahora los adolescentes valencianos aprenderán mandarín, una vez amaestrado el inglés, ofcors! para hablar con casi 1.400 millones de personas adicionales ¿de qué? eso es secundario, como la ESO.
El consejero sostiene que los valencianos, como los ingleses, que sí dominan el inglés, se llevarán el pato al agua —laqueado, con té, o en paella, según— en los bísnisis futuros que surjan con China.
No dudo de que, a cambio, Beijín importará mucho arroz del valenciano, bien rico, chiquets.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Escritores de cemento

ESCRITORES
Se le agotaban los lugares de acción habituales. Había trabajado furiosamente más de diez semanas, porque pronto su delito se consideraría arte, y no quería aceptarlo. Empezó pintado carpetas de estudiante, puertas de retretes y retales de papel para sus novietas. Cubrió muros, puentes, túneles y otras obras de uso público. Expresión de rebeldía. Ahora, la vanguardia intelectual daba el salto crucial de declararlo estético y catalogable sin su permiso. Habría museos y zonas autorizadas; incluso, revistas con graffitis de su grupo de escritores. Ya no sería lo mismo. Qué más daba, pronto cumpliría los cincuenta y tampoco era plan.

jueves, 12 de febrero de 2009

Gürtel y otros germanismos

UNA BUENA IDEA PARA APRENDER UN IDIOMA
Para facilitar la interculturalidad, voy a darle «de gratis» unas pistas al juez mediático, para las siguientes operaciones que vaya a iniciar. Siendo un personaje culto, presumo su conocimiento —no su inocencia— de la pronunciación teutona, o bien, la germanofilia del asesor que tuvo la pintoresca ocurrencia de llamar Gürtel a la operación Correa.
Todo suyo, don Baltasar:
Alcalde: Bürgermeister.
Ayuntamiento: Rathaus.
Bermejo: rotblond.
Bigote: Schnurrbart.
Cacería: Jägerei.
Cohecho: Bestechung.
Constructor: Bauunternehmer.
Correa: Gürtel.
Corrupción: hay dos, la fácil, Korruption, y la avanzada, que la hace parecer más censurable, Bestechungsversuch.
Esperanza: Hoffnung.
Garzón: Reiher.
Gomina: Haarfestiger.
Prevaricación: Rechtsbeugung.
Zapatero: Schuhmacher.

martes, 10 de febrero de 2009

Preconcebido sufre

SIEMPRE HAY MÁS ALTERNATIVAS
Lo preconcebido quiso dirigirse a lo inconcebible, para narrarle cuánto sufría. Su porvenir era como su presente: previsible, inamovible, invariable y limitado, de mente estrecha, firme y sin perspectivas. Tenía envidia porque lo inconcebible, a pesar de ser inviable, abría grandes posibilidades a la imaginación, a la literatura, al arte, a lo infinito, a lo microscópico o, incluso, al futuro. Ya había ocurrido antes, cuando algún ente utópico llegó a ser concebido en un útero mental y genial que le dio una inesperada existencia liberadora.
Tanto padecía, que decidió —¿era posible?— negarse a existir, disolviéndose en un ataque de espontaneidad.

jueves, 5 de febrero de 2009

Evaristo, y otros recuerdos


Evaristo, el tipo sin interés, pasó a saludar a su compañera Malena, la del regalo estilizado. Le explicó que estaba preocupado: esa mañana no abrió los ojos a la hora acostumbrada. Su organismo se revelaba y su adiestramiento matinal dejaba de ser efectivo, para ser natural. Se tomaría su cafetito, prosiguió, para ser persona, y reflexionaría sobre su postura ante el apagón digital de la semana anterior. Malena le escuchaba atentamente, sin interrumpir. ¡Ya podía reformatearse! pensó, pues había llegado mientras asimilaba unos atajos mentales de teclado, y tardaría mazo en repasarlos. En fin, si contármelo le hace feliz, sea.

jueves, 29 de enero de 2009

Supresión apresurada


Ya fuera de la habitación, sentí que su despedida escondía un resquemor mal disimulado. No sabía si volvería a verla, tampoco si lo deseaba. Fallé al complacer sus expectativas con mi acostumbrada destreza. Hubo respuestas cortas, heladoras muestras de contrariedad, salpicadas de forzadas expresiones de alegría. Qué desazón. Debía solucionarlo, pero no de inmediato. Cada uno tiene su espacio, sin agobios. Basta un traspiés para disipar el atractivo, como una sola mentira para truncar todo un impecable historial de sinceridad. Pero no aguanté. Error. En diez minutos mi nic desaparecía de su lista de contactos, y yo de su vida.

jueves, 22 de enero de 2009

Facundo el ijnorante


A lomos de su estulticia, Facundo gira con gran intrepidez. Su recorrido es siempre circular, cual burro de noria, y de diámetro variable, según el momento o el campo del saber en que se encharque. Hay ratos de gran osadía, en los que triunfa, pues sus devotos —personajetes que el tiempo ha cribado con naturalidad, como en la evolución— ovacionan a ciegas sus enseñanzas y conclusiones. Algún día la curva de su erudición de bolsillo se desparramará errática, y todos podremos ver que Facundo es un paradigma de lo que mi sabio progenitor llamaba con sorna un «ijnorante con ege».

lunes, 19 de enero de 2009

El silencio de los morteros


Ya callan, o, al menos, bajan la voz, las almas de los cañones —¿desalmados?— defensovengadores de Israel y secos de razón de Hamás. Avanzan otras voces, entre jammames y piscinas de cumbres pletóricas de sonrisas. Imagino a esos diplomáticos quitándose las versallescas calzas y puñetas de hace varios siglos: «Pasad, pasad, sr. Presidente, la terma está ideal» «Tras vuesa merced, Sr. Olmert, ¡salam a’leikum! paz con vos».
Hasta hoy, trece centenas de corderos se han sacrificado en un holocausto imposible de digerir. Tormento silenciado —vaya casualidad— media semana antes de que el emperador negro ocupe su trono. El guión continúa.

lunes, 12 de enero de 2009

Cuentacuentos: viejo oficio, misión renovada


Alguien ha deducido, y lo cuenta, que en occidente —mayormente— interpretamos una suerte de culebrón global, narrado por nuestros líderes, ora locales, ora mundiales, que pergeñan episodios [con]fundidos con la actualidad, o provocándola, con arreglo a intereses nada literarios.
Ya no desmenuzan teorías ni pensamientos políticos o económicos de gran calado. Ahora nos saturan con historias cercanas, más sugestivas y conmovedoras. La opinión pública deviene emoción pública. Esta arma de distracción masiva, el storytelling, estaría llegando a todos los ámbitos sociales y culturales. Hoy mismo pediré que me dejen salir de escena, o bien, permiso para escribir mi propio guión.

sábado, 10 de enero de 2009

¿No-? ¡sin, in-, des- o antónimos, por favor!


Ya en casa, telefoneé justificando mi no-asistencia a clase. La no-limpieza de las calles, debida a la no-llegada de las máquinas quitanieves provocó la no-fluidez de las vías públicas. La no-información nos tenía a todos en ascuas, pues la no-cobertura de los móviles en la zona provocaba la no-continuidad de las llamadas. Por la radio proponían ante el no-buen tiempo, no-mala cara ¿dura, no-dura o carámbana? por el frío, más que nada. Bloqueados, ni avanzábamos ni retrocedíamos. Por suerte, de forma no-esperada, los servicios de emergencias acudieron en nuestra ayuda, apaciguando las escenas de no-paciencia y cabreo que ya proliferaban.

jueves, 8 de enero de 2009

Cien ojos por ojo: todos ciegos


El cuerpo pide respuestas; la cabeza no las encuentra. Exhibir cadáveres rotos de futuros condenados a vestir chalecos mortíferos alimenta una demagogia sangrante e indefendible, pero los bombarderos del Tzáhal podían evitar que esa infantería aún inocente engrosara el santoral de mártires precoces, quedándose en sus hangares, y favoreciendo el entendimiento, por inviable que parezca.
La ley del Talión no cabe en este siglo, heredero de la venganza ¿justificada? y del derecho a la propia defensa del anterior. Si debemos compartir las consecuencias del conflicto, Israel no puede actuar simultáneamente como parte, juez y verdugo mientras exploramos nuestro ombligo occidental.

miércoles, 7 de enero de 2009

Yes, I can (pero no siempre)


Me fallaba el método: anotaciones en una agenda, iniciar una hoja de cálculo con fechas y logros, apuntes en la pedeá, fichas, comentarios a mis afines. Algo debía hacer, pues el año pasado estuve a punto de conseguirlo innumerables veces y pensé, ingenuo, que éste sería el definitivo. El dilema es que ignoraba cómo medir el éxito, y eso me consumía. Ningún manual de autoayuda —timos editoriales con aspiraciones pseudofilantrópicas— me daba una pista certera. Y pasó lo inevitable. Otra ocupación más urgente y atractiva me volvió a distraer del ambicioso propósito anual: aumentar algunas décimas mi fuerza de voluntad.

lunes, 5 de enero de 2009

Mirra lo que te han echado



De los obsequios que los sabios del este ofrecieron a Jesús, la mirra es, seguro, el menos conocido. Los incontables usos de esa resina endurecida la convertían en algo mucho más precioso que los otros dos presentes: proteger la salud, como desinfectante, medicina o perfume; conservar los cuerpos difuntos, embalsamados, o, incluso, anestesiar y narcotizar —Cristo rechazó vino con mirra en el Gólgota, según Mateo. En tiempos carentes de índices bursátiles, era un oloroso signo de opulencia que con los siglos cedió terreno a energéticos y contaminantes fósiles, también orientales. Seduce la idea de un progreso impulsado por perfumes caros.

sábado, 3 de enero de 2009

Cante sin copirrait


La lucha por los micrófonos era encarnizada. Los niveles de etanol en sangre superaban los de la vergüenza en cara, y nunca antes un salón familiar había alojado tal conflicto por un aparato. Ni siquiera «El mando» fue objeto jamás de tanta avidez. Debíamos poner nuestra voz, siguiendo la chuleta, a músicas de reconocida popularidad. Ahora es más vanguardista, con pautas tonales y letreros que nos incitan a prolongar el destrozo con nuestro virtuosismo escaso de pelo. Que se sepa, la esgae aún no irrumpe en casa —salvo espías— para exigirnos su diezmo digital ¿sería lo nuestro creación o imitación?