martes, 25 de noviembre de 2008

Subastan chapas


Acabo de ver en ibei que alguien subastaba una chapa doblada, con el argumento comercial de que los gastos de envío serían los mismos para una que para cien unidades.
Pasmado me quedo. Lo llamativo no es que haya subastadores de chapas, sino que también exista —intentaré seguir la subasta hasta el final— quien pague por conseguir algo de dudoso valor y con un aspecto indigno de una nostálgica colección de tapones de botella antiguos, se me ocurre. Aún más fascinante es ver cómo, en tiempos de crisis, pueden emparejarse necesidad y tecnología, en una versión cibernáutica del tradicional chamarilero.

viernes, 21 de noviembre de 2008

Medidas polivalentes


En el colegio aún enseñan unidades de medida de uso tan escaso como el decilitro, el hectómetro, el decagramo o el quintal métrico. Dejan fuera de los libros otras más prácticas, como el bit, el byte, los baudios por segundo, los megas (aunque se llame casi como una bruja, un mega es masculino), los gigas, los píxeles, y así, hasta el infinito y mucho más. Menos mal que la generación 3G las conoce —y utiliza— sobradamente, y para el volumen, la capacidad y la distancia ha alcanzado la uniformidad, con un valor omnipresente y adecuado para casi todo: el mazo.

Autobombo


La bola 1 golpea a la siguiente, ésta a la 3, y la carambola prosigue con una inacabable sucesión de embates, hasta alcanzar la última canica, etiquetada con un número 1000, que debe deslizarse por una espiral camino de una plataforma que se hunde bajo su peso, presionando una palanca iniciadora de otro turno de choques encadenados, ahora de piezas de dominó, que sucumben sincronizadas formando varias ramas paralelas con los colores del espectro. Al llegar al final, las fichas accionan un mecanismo que iza súbitamente un banderín donde se lee: 100 palabras 100 punto blogspot punto com. Todos aplauden.

sábado, 15 de noviembre de 2008

¡Diga treinta y tres!


Na’am, sadiqi, kalam zalaza ua zalazín! Sí, amigo mío, diga treinta y tres, y repítalo sin parar, incluso alternándolo en hassanía, si se anima, y mientras lo repite, rememore todo lo que ha vivido durante sus últimos 33 años, usted o su familia: dónde han estado, cómo han evolucionado su entorno, su barrio, su empresa, su casa. Cuánto ha viajado, aprendido, conocido... debería repetirlo días y días y no acabaría. Al sur de Argelia hay varios centenares de miles de personas, hombres, mujeres, niños y niñas, que tardarían sólo tres minutos, y puede que aún les sobrasen dos y medio.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Refundación de la vergüenza – The film


En el campamento el ambiente era optimista, se iban a reunir muy cerca de allí los líderes mundiales con el propósito de solventar su situación y la de muchos otros refugiados de todo el mundo. Un multibillonario plan de rescate los sacaría del olvido, y podrían regresar a sus tierras con unas ayudas preliminares. Además, una intensa operación diplomática a escala mundial había sellado acuerdos de paz en todos y cada uno de los puntos calientes del globo. Habría abundante trabajo en sus países, ricos en recursos naturales sin explotar. La película acabó sin títulos de crédito, ni de débito.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Yo soy yo y mis atajos de teclado




Mi colega, amigo y maestro Xosé Castro trotamundea predicando cómo optimizar los movimientos de los dedos sobre el teclado. Como es traductor, lo llama tradumática, ¡toma parasíntesis!

Por su parte, mi hija adolescente aprendió sola muchos de los atajos cuando aún era púber, pero no los bautizó. Con su natural osadía juvenil para investigar y asimilar lo más práctico de cada artilugio, los descubrió instintuitivamente –subasto palabro, ¡pujad, bitacoreros!–, pero sólo usa los eficaces, ¡al grano, jovencitos! Ahora, teléfonos y ordenadores se manejan a dedo, con tacto, pellizcos y toques suaves ¿inventarán atajos acariciadores para los mortales sin pantalla?

martes, 11 de noviembre de 2008

El tipo de interés



Evaristo me confesó que no se consideraba un tipo de interés, pues nunca le habían hecho crecer los titubeos del mercado, ni las crisis, ni lo que dictaminase sobre él el BCE o la Reserva Federal. Por el contrario, su talla jamás mermaba en momentos económicos apacibles, pues su ideal era revalorizarse sin parar, ajeno a mercantilismos, y que lo crecido o deprimido que pudiera cotizarse fuera consecuencia de factores más estables, anticuados de mencionar, como la solidaridad, el servicio desinteresado a los demás y otros, más intemporales, como sus imparables ganas de repartir por doquier sus altísimos dividendos emocionales.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Hoy somos todos negros




Aunque nuestra única raza sea la humana, pues el color de la piel es accidental, igual que la forma de la nariz, los ojos o la ondulación del cabello. Ahora cabe preguntarse si el nuevo emperador sabrá ponerse colorado ante las injusticias que promete erradicar, o blanco cuando se cabree mucho con algún líder amarillo, rosado o marrón de otras latitudes. La esperanza de su mensaje —¿verde, como el dólar?— ha llegado a todo el mundo democrático, y parece que hoy nos sentimos algo mejor dentro de nuestra epidermis. Enhorabuena, Obama, pero cuidado con jodernos lo último que queremos perder.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Mirada frontal



Era un ser añejo, de aspecto sólido, pulido, pero muy atractivo. Los que se acercaban para observarlo desde un flanco sufrían preocupados porque algunas zonas inferiores soportaban la presión del resto de la estructura. Los que preferían mirarlo sólo desde el otro lado, destacaban la pureza de los materiales, destinados a durar eternamente, o los brillos que producían cuando reflejaban el sol. Otros, orientaban los ojos hacia pequeños fragmentos concretos, muy reducidos. Ninguno de los espectadores caía en que la belleza de aquel ente sólo podía apreciarse al contemplarlo de frente, en su integridad, como ya nos contara algún antiguo.